¡MOSSSQUEATE!

Poco a poco el MOSSS va dando pasos y alcanzando pequeños objetivos, sin embargo, hay que reconocer que cambiar hábitos cuesta. Con el paso del tiempo y el avance tecnológico nos hemos acostumbrado a ir en vehículos particulares hasta la puerta de nuestro lugar de destino, desplazándonos de una forma más cómoda, pero olvidando que al mismo tiempo estamos generando nuevos problemas: contaminación ambiental derivada del uso de vehículos a motor, estrés como consecuencia de los atascos y aglomeraciones, trastornos psicosomáticos derivados del ruido producido por la circulación, incrementos de peso derivados de la falta de ejercicio y, muy especialmente, las víctimas derivadas de los siniestros a causa del tráfico.

Tenemos que tomar una decisión y cambiar, desaprender para aprender nuevos hábitos más seguros y saludables. Desplazarnos caminando, en bicicleta o haciendo uso de vehículos de transporte público ayudará a mejorar nuestro entorno, nuestra salud y nuestra integridad física.

Pero no basta con decir vamos a intentarlo, tenemos que provocar un cambio para poder avanzar hacia un modelo social más seguro y saludable. 

Pese a los esfuerzos que se están llevando a cabo son pocos los cambios que realmente se están observando en las inmediaciones del centro escolar, hay que preguntarse ¿hemos cambiado?, y en caso negativo ¡MOSSSqueate!, ¡Vamos a intentarlo!.