jueves, 7 de marzo de 2013

LA EDUCACIÓN VIAL ES COSA DE TODOS


Se puede definir como docente a toda persona que se dedica a enseñar o que realiza acciones referentes a la enseñanza. Sin duda todos tenemos una parte de docentes. De hecho los primeros docentes que conocemos en nuestra vida son nuestros propios padres, son ellos los que nos marcan las directrices y van contribuyendo a nuestro desarrollo integral como personas. Cuando tenemos edad para entrar en el sistema reglado la docencia es asumida por los profesores con los que nos encontramos en los colegios e institutos, pero estos no están solos. Afortunadamente vivimos en una sociedad que apuesta por la importancia de la vinculación de la familia, la escuela y la sociedad para un óptimo desarrollo de todos y cada uno de sus miembros.
Las distintas comunidades educativas contribuyen, en la medida de sus posibilidades a complementar diversos aspectos formativos que nos son presentados de forma transversal, como es el caso de la educación vial.
Ya desde pequeños venimos siendo usuarios de vehículos de transporte, tanto públicos como privados al tiempo que somos peatones en pueblos y ciudades. Sin duda aprendemos a asumir esos roles por lo que vemos, por lo que nos dicen nuestros padres, por lo que nos enseñan nuestros profesores y últimamente por lo que nos cuentan los policías que han empezado a venir a los colegios como miembros activos de la comunidad educativa.
Entendemos que la Educación Vial en su conjunto es una tarea de todos. No sólo debemos preocuparnos de la Educación Vial a través de las diversas instituciones sociales básicas: la familia, la escuela, el Estado, la Iglesia, los medios de comunicación, y diversas instituciones públicas y privadas, sino también en todas las situaciones convivenciales sin olvidarnos que el tráfico está presente en todo momento en nuestras vidas tanto de peatón, como de conductor, y de usuario de transporte y viajero.
Entendemos que la educación vial es una responsabilidad del total de la sociedad, el compromiso por mejorar la educación vial debe también venir desde la casa, desde el colegio, desde el ejemplo. Implementar como materia transversal este tema en las escuelas es un aspecto fantástico, pero necesitamos el compromiso de todos. Sin duda una colaboración entre todos los miembros de la comunidad educativa: familia, escuela y miembros de la sociedad, favorecerá el desarrollo integral del alumnado en pro de una mejora de la calidad de la enseñanza y por extensión de la sociedad.
Llevo 22 años trabajando en educación especial, soy maestra de formación y de vocación; y desde hace casi 6 he contado con la ayuda incuestionable de unas personas maravillosas en este campo que nos ocupa. Me refiero a los miembros de la asociación APEMEV, una asociación que ha dado entrada a policías, a maestros, a familiares, a víctimas de accidente, todos ellos convertidos hoy en DOCENTES, Y TODOS CON UN FIN: PROMOVER LA EDUCACIÓN VIAL.


Sin duda, me quito el sombrero ante todos por el maravilloso trabajo que están realizando, porque ofrecen a la educación vial una base sólida en la que todos y cada uno de sus integrantes es capaz de aportar su experiencia. Defiendo una metodología de trabajo cuya máxima es “aprender a hacer, haciendo”, y en el campo de la educación vial no podemos olvidar la experiencia vivida por las víctimas, por los familiares, por los docentes…que junto a los policías constituyen un equipo multidisciplinar que enriquece la oferta formativa que queremos para nuestros niños. Apostemos pues por una formación multidisciplinar y multiprofesional.

Fdo.- Ana María Riaño Galán
Una docente convencida de la importancia de transmitir valores viales desde distintas perspectivas.

2 comentarios:

Jose Maria Navarro dijo...

Hola Ana Maria, me alegra leer tus palabras y me identifico totalmente con ellas. Desde el año 1989 llevo trabajando en temas de Educación Vial, fue en aquel año cuando cogí conciencia de lo mucho que se puede trasmitir y aportar como persona en este tema.
En 1997 la Generalitat de Catalunya entregó un premio al RACC por desarrollar un programa de Educación Vial y participar en él unos 8.000 niños y niñas, y concedió un reconocimiento al Grupo de Trabajo de Monitores de Cataluña (hoy en día asociación ADEVIC) por su implicación, su difusión y el debate creado en torno al tema. Recuerdo que en aquel entonces, el grupo trabajaba con unos 27 programas de diferentes poblaciones y por sus aulas pasaban cerca de 50.000 alumnos.
Cuando el muy Honorable Sr. Pomès, Conseller d'Interior de la Generalitat de Catalunya, me felicitó en nombre del Grupo por el trabajo y la difusión de la Educación Vial, le comenté emocionado “Gracias señor, la Educación Vial es cosa de todos”.
Desde aquel día he intentado trasmitir este mensaje a todas las personas que han trabajado conmigo y sigo pensando que cada uno de nosotros podemos aportar nuestro granito de arena.
En el año 2000 se difundió un triptico en Badalona con ese mensaje y las VIII Jornadas Estatales que se celebraron en La Linea de la Concepción llevaron como titulo “La Educación Vial es cosa de todos” . Pero me alegro mucho, porque nadie había definido también como tú, estas palabras y lo mejor de todo es que leyendo tus letras trasmites que las tienes integradas.
Gracias, me has emocionado.
Un abrazo para ti y todos los componentes de APEMEV
José María Navarro

suri riga dijo...

Querido Jose María. Me alegra ver que en distintos puntos de nuestra geografía hay personas sensibilizadas con el tema que hoy nos ocupa. Sin duda muchos pocos conseguiremos algún día hacer un mucho. Un beso muy grande desde Cantabria.
Ana Riaño